sábado, 10 de junio de 2017

7 Secretos para ser feliz y tener éxito en la vida

7 Secretos para ser feliz y tener éxito en la vida

Resumen Master Class: 7 Secretos para ser feliz y tener éxito en la vida

Resumen Master Class de Mario Alonso Puig con título “7 Secretos para ser feliz y tener éxito en la vida” en el programa El Hormiguero.

El éxito es entrenamiento

Primer secreto: Gestiona tu cara y gestionarás tus emociones

La cara y las manos son los órganos donde hay más receptores. El cerebro está constantemente tratando de averiguar que está pensando la cara, recoge mucha información de ella. Si la cara está alegre, el cerebro trata de actuar en consecuencia. La sonrisa tiene la capacidad de producir un impacto muy importante en la parte prefrontal izquierda. Sonreír ayuda a contrarrestar los efectos de un cabreo o un mal día.
Cuando el musculo facial genera un movimiento contrario a lo que está pensando el cerebro, se genera un estado de confusión. El cerebro puede estar enfadado, pero el cuerpo no le sigue. Si mantienes la sonrisa durante más tiempo, la trabajabas para que parezca más auténtica, determinados problemas (problemas digestivos, dolor de estómago, mal humor… ) se reducen, llegando a desaparecer si se practica durante dos semanas seguidas.
Cuando te levantes por la mañana recuerda que una de las prioridades del día es sonreír a las personas que no te son agradables. Sonreír es un entrenamiento, igual que se entrenan los músculos en un gimnasio. Cuando cambias la forma de ver las cosas, las cosas cambian.

Segundo secreto: Usa tu dialogo interior para apoyarte, no para anularte

Hoy se sabe que el diálogo interior es capaz de frenar cualquier proyecto, cualquier idea, cualquier ilusión. Si no le pones freno, es capaz de anularte. Si no le pones límites, es capaz de generar problemas de salud, matar neuronas… El 60-90% de las consultas que se realizan a médicos de cabecera tienen que ver con emociones aflictivas cuando se mantienen en el tiempo, cuando vives en una constante desesperanza o resentimiento.
No hay que dejarse secuestrar por una emoción negativa. Si quieres cambiar un pensamiento hay que apreciar cuatro puntos:
  1. Qué noto en mi cuerpo (opresión en el pecho, tirantez en el cuello, la mandíbula apretada…). Centra la atención en observar el cuerpo.
  2. Qué estoy sintiendo (lo que sea, no importa). Pon un nombre a lo que sientes.
  3. Qué me estoy diciendo para sentirme así. Observa el pensamiento, trata de reconocerlo. No trates de juzgarlo, solo reconocerlo.
  4. Qué exageración hay aquí. Aunque te digas “no hay justicia”, a veces sabes que sí la hay. “No sirvo para algo”, espera, a veces si hago algo bien.
Hay que salir de la zona oscura del inconsciente, reconocer y limitar el supuesto problema. Apreciados los cuatro puntos del pensamiento, hay que apreciar otros cuatro puntos más:
  1. Qué me podría decir a mi mismo para sentirme mejor. Piensa en las cosas que has hecho bien, cuándo has sido capaz de hacer algo.
  2. Qué empiezo a sentir. Si llegas a este punto, veras como comienzan a producirse cambios, te puedes sentir menos enfadado, te sientes menos frustrado…
  3. Qué noto en mi cuerpo. La tensión mandibular, al igual que la del cuello, baja.
  4. Cuál es el primer paso que tengo que dar. Das el primer paso.
Cada día, cuando notes que una emoción tóxica te ha envuelto, primero, reconoce el daño que te está haciendo, y empieza con el primer paso. Si haces los ocho pasos, al final, te darás cuenta que quien mandas eres tú, no la emociones tóxicas que arruinan la vida.

Tercer secreto: Recarga las pilas o puedes acabar en el cubo de la basura

Cada vez que alguien tiene estrés, tiene que curarse por completo. Si el estrés no se cura bien acumula carga nostálgica. La reacción de estrés tiene que producir tres cosas:
  1. Conseguir eficiencia (bajando la glucosa o defendiendo sobre un problema).
  2. Mantener el equilibrio.
  3. Generar energía.
El problema de hoy es que la reacción de estrés está permanentemente activada. Tenemos miedo, tenemos preocupaciones, vivimos en un mundo incierto… Que no se apague nunca la reacción de estrés produce  una carga similar a los efectos producidos por un residuo tóxico. No somos conscientes que esa carga se va produciendo y acumulando, hasta que se aprecia determinados rasgos: pérdida de la capacidad de concentración, pérdida de la capacidad de análisis, pérdida de capacidad de decisión, nos volvemos irritables, tenemos insomnio, estamos agotados. En el peor de los casos podemos llegar a enfermar.
¿Cómo enfrentarse al estrés? 
  1. Es tal el nivel de tensión en el que vivimos que cada 2-3 horas deberíamos hacer algo para reducir la carga de estrés. Cada 2-3 horas hay que realizar diez respiraciones profundas (esto produce el aumento de la serotonina).
  2. Apretar con fuerza los puños y liberar (en el momento de apretar los puños también hay que respirar muy profundamente).
  3. Dedicar diez minutos al día a pasear (acelerando el ritmo cardíaco y respiratorio).
  4. Si estás muy tenso, coge una hoja de papel y describe las palabras que representen lo que estas sintiendo, no lo que piensas, lo que sientes; cuando termines de escribir aquello que sientes, lo arrugas y lo tiras a la papelera. Ahora, coge otro papel y describe como te quieres sentir (alegre, contento, tranquilo…); este papel lo coges y lo guardas. Recuerda, durante cuatro días, el papel que has guardado y las palabras que has escrito. El lenguaje tiene un poder enorme frente a las emociones.

Cuarto secreto: No hay nadie que tenga tanta influencia en nosotros como nosotros mismos.

Inflúyete a ti mismo. Nadie puede hacerte sentir inferior si tu consentimiento. A veces, la cabeza funciona como una jaula de grillos, vemos personas que no nos han valorado, nos han hecho daño. Esto genera mucho ruido interior. Genera dos tipos de emociones:
  1. Frustración
  2. Resentimiento
Esto produce pérdida de la capacidad de análisis. No se puede tolerar este tipo de ruido mental porque es muy disfuncional. El agradecimiento ayuda a limitar y poner freno al ruido interiorEl agradecimiento obliga a fijar la atención en algo radicalmente distinta. Cuando cambias el foco de atención, cambias las emociones.
La noche es el momento en el que se reprograma la mente. Dedica tres veces al día, durante 5 minutos, a llevar la atención a aquello que en tu vida funciona, te inspira, te ayuda. Tienes que sentir ese momento, no vale solo pensarlo, tienes que recordarlo intelectualmente. El inconsciente necesita sentimientos e imágenes.

Quinto secreto: Si lo puedes imaginar, lo puedes crear.

Si imaginas una situación como si estuviera sucediendo, si te ves capaz de gestionarla, empieza a suceder cambios en el cerebro. El objetivo es inducir un estado emocional que tenga la capacidad de alterar el comportamiento de las neuronas.
Cuando en vez de enfocarte en lo que temes, te enfocas en lo que quieres, hay un proceso de movimiento de células madre que empiezan a convertirse en neuronas. Las neuronas que ya están cambian sus ramificaciones, de tal manera que empiezas a generar dentro de ti esa capacidad que te permite hacer frente a esos desafíos con más soltura, con mayor sensación de seguridad. La ilusión es una herramienta estupenda para crear una nueva realidad. El cuerpo cambia si cree que algo va a suceder.
La obsesión no tiene que estar en conseguir exactamente el resultado ideal, sino en poner en marcha un proceso que ayude a aflorar nuestra mejor versión. Dedica por la mañana, durante 5 minutos, a:
  1. Pregúntate cuál es el reto de hoy.
  2. Una vez que tienes claro el reto marcado, piensa, hasta llegar a los cinco minutos, que estás realizando ese reto. Siéntelo, imagínate realizándolo con serenidad, seguridad y aplomo.

Sexto secreto: Por la noche eliges lo que te construye o lo que te destruye

El sueño es de las cosas que pensamos que mientras menos tiempo le dediquemos, más tiempo tenemos para hacer otras cosas. Cuando se reduce en exceso el sueño, dormir menos de 7 horas, se producen varios cambios en nuestros sistemas de defensa.
Durante el sueño se activa la región del sistema nervioso que se llama parasimpático dedicado a recuperar el desgaste del cuerpo y relajar la mente. Cuando te habitúas a dormir poco, pierdes capacidad de atención, capacidad de concentración.
El sueño no es una pérdida de tiempo, la biología del ser humano requiere de su tiempo para recuperarse. Dormir poco engorda. La dieta, el ejercicio y el sueño están muy relacionados. Si una persona no duerme no puede ser feliz. Cuando se duerme poco se genera una gran ansiedad, dificultando las relaciones interpersonales, se ven las cosas de manera mucho más pesimista.
Trata de dormir entre 7-8 horas diariamente y observa sus efectos en el estado de ánimo, la capacidad de concentración y aprendizaje. Estando en la cama, dos minutos antes de dormir, trata de recordar algo que durante el día haya funcionado. Quieres mandar un mensaje positivo al inconsciente y para ello, solo se llega a través de imágenes y sentimientos. Nuestra identidad personal mejora si antes de acostarnos tenemos en la mente recuerdos positivos.

Séptimo secreto: No hay felicidad sin el otro

Cuando a ti te importa verdaderamente las otras personas, empiezas a cambiar biológicamente. Cuando tienes un gesto de amabilidad, afecto, hacia otra persona, empieza a elevarse los niveles de oxitocina. La oxitocina baja los niveles de ansiedad, es uno de los mejores protectores del corazón, hace que el corazón funcione de una forma correcta. La oxitocina baja los niveles de colesterol. En la vida te llevas lo que das.
Cada día, cuando te levantes, recuérdate que una de los objetivos es ayudar a otro, ayudarle a aliviar su carga, regalarle una sonrisa, reconocer alguna acción bien hecha.

martes, 21 de marzo de 2017

la vida



1. Recuerda que solo tienes una vida; esto no es un ensayo general.
2. Intenta ser positivo y buscar el lado bueno de cada experiencia vital.
3. Piensa en el aquí y el ahora.
4. Vive cada día de tu vida plenamente, porque no sabes lo que te espera a la vuelta de la esquina.
5. Recuerda que la vida puede cambiar en un instante.
6. Ama todas las etapas de tu vida y no temas pasar por ninguna, porque todas y cada una de ellas son mágicas.
7. Aprende a vivir el momento. Si consigues hacerlo cuando eres joven, te ayudará cuando tengas 60.
8. La vida es demasiado corta como para estar preocupándose por algo que ocurrirá en el futuro. Vive el hoy.
9. ¡Sal y disfruta de la naturaleza!
10. Busca un hobby o un empleo que te hagan experimentar las diferentes sensaciones de cada fase de tu vida.
11. Sé tú misma. Envejece con dignidad.
12. Concéntrate en envejecer de forma positiva, no en evitar el envejecimiento.
13. Acepta los cambios de tu cuerpo y de tu mente a medida que vas madurando.
14. Sé sincera contigo misma siempre. Es un proceso de aprendizaje lento, pero merece la pena.
15. Guarda tus recuerdos, pero no seas demasiado dura contigo misma.
16. Virginia Wolf tenía razón; una mujer necesita una habitación para ella sola y 500 dólares.
17. Olvídate de los estereotipos que tiene la sociedad sobre el envejecimiento.
18. No te preocupes por envejecer. Preocúpate por el aburrimiento.
19. La edad es solo un número; no define quién eres.
20. El tiempo va a pasar quieras o no, así que ¡empieza a vivirlo!
21. No dejes de inspirarte.
22. Vive de una manera sencilla y ahorra. Ejercítate, cultívate, lee y viaja.
23. Cómprate ropa clásica. Siempre estará a la moda.
24. No malgastes el dinero en zapatos; los hombres no se fijan en tus pies.
25. ¡No llenes tu vida de basura!
26. Sé tú misma; brilla con luz propia. Muéstrate presente, verdadera, consciente y viva en cada momento.
27. No te obsesiones con las arrugas. Cuando empiecen a aparecer en tu cara, piensa que son el mapa de tu vida.
28. Vive con pasión y con amor, con los ojos y el corazón abiertos. Simplemente, sé feliz.
29. Vive el presente; no te preocupes por envejecer. Lo mejor está por venir.
30. Valora los pequeños placeres de la vida; no compliques más las cosas.
31. Quiere y respeta a tu pareja y a tus hijos del mismo modo que quieres que ellos te amen y te respeten a ti.
32. Da tu amor de forma libre e incondicional.
33. Ten hijos cuando quieras tenerlos: no hay un momento clave y específico para ello.
34. Muestra empatía contigo misma y con los que te rodean.
35. Haz muchas fotos. Te alegrarás de tenerlas cuando tus seres queridos dejen de estar ahí.
36. Aprende a perdonar desde la juventud.
37. Olvida tus enfados, y deja que la gratitud y la alegría inunden tu vida.
38. Ten un círculo íntimo de amigas. ¡Es fundamental!
39. Valora a tu familia. Estarán contigo cuando los demás se alejen. Te apoyarán durante todo el recorrido de tu vida.
40. Nunca te vayas a dormir enfadada contigo misma o con otra persona.
41. Dile a tu pareja, a tus amigos y a tu familia que los quieres todos los días.
42. A los 30 te haces mujer. Aprecia tu belleza.
43. No pierdas el tiempo preocupándote de cosas que no puedes cambiar; cambia las cosas que sí puedes.
44. Sal cuanto antes de una mala relación; no puedes cambiar a la otra persona.
45. ¡Cuida tu piel! Sonríe con frecuencia.
46. Confía en tus instintos y nunca hables mal de ti.
47. Sé amable contigo misma. No tengas en cuenta lo que no está bajo tu control. Si hay algo que te hace sentir mal, sácalo de tu vida.
48. Aprende a reírte de ti misma. ¡No seas tan seria!
49. Concédete un rato para ti misma cada día; ríete y sonríe a cada momento.
50. Simplemente, sé tu misma. No ansíes la perfección.
51. Si tienes hijos, quiérelos, pero no intentes ser una madre perfecta.
52. Deja que tu hijo sea tu maestro.
53. Sé una guerrera; aprende a disponer de tus propios recursos y a ser autosuficiente.
54. No dejes guiarte por el miedo.
55. No dejes de aprender y refuerza tu mente, tu físico y tu espíritu.
56. Muéstrate agradecida cada día, hasta cuando sea un mal día. Siempre hay una lección por aprender.
57. Acepta los aspectos positivos del envejecimiento, como el hecho de tener menos responsabilidad y más libertad.
58. Muchas batallas se simplifican con la edad.
59. ¡No dejes que nadie te diga que eres demasiado vieja para hacer algo! O demasiado joven.
60. No tengas miedo. Cuando envejezcas, te sentirás bien. La vida y la naturaleza te preparan para cada fase de tu vida.

martes, 14 de febrero de 2017

"Y después de ese día dejó de ser la misma. Se convirtió en una chica fría... Sus ojos ya no reflejaban la dulzura de su alma."

"Seguro que vienes bebida, drogada y follada"

Eres perfecta. Siempre lo pensé y siempre lo pensaré. Pero no eras para mí.
Eras equilibrio, pasión, ganas, alegría (aunque estuvieras seria), encantadora, deportista, saludable, tan centrada en todo, INCLUSO EN MI... Un ejemplo, un diamante que no supe cuidar ni apreciar.

Me encantaba besarte, tocarte, olerte, sentirte, dormir contigo acoplada a tu cuerpo y descansar profundamente, que me cuidaras, que te bebieras tu té, que me hicieras un té, que cocinaras -todo riquísimo, por cierto-, andar contigo por la calle y tener ganas de besarte sin hacerlo, tu pelo despeinado, tus manos re... tus manos, tus uñas pintadas, tus dedos, tu boca, despertar por las noches y ver que estabas aquí conmigo y sentirme afortunada, ir por detrás cuando cocinabas y abrazarte, observar rápidamente lo que hacías y luego irme sin que te enteraras, ir a tu habitación y verte entretenida escribiendo, ir a nuestra habitación y pasar las noches contigo, enfadarme pero abrazarte, que fueras la dueña de mi casa. Todo lo mío era tuyo.

Siento no haber estado a la altura, haber sido una niña y no una mujer aunque tu me hacías sentir así, indefensa, vulnerable, pequeñita.
Quizás fue demasiado pronto, quizás no estaba preparada, quizás no te esperaba, quizás es lo mejor, quizás no eras tú. Y ahora todo se acabó: rápido, seco, sin esperarlo... por mi culpa. No te valoré lo suficiente pero otros lo harán. No pierdes el tiempo.


Cosas que nunca te dije: Te Quiero. El resto no importa.

Gracias por haber compartido estos momentos conmigo. Aunque no lo creas, disfrute de cada minuto que pasé contigo.








¿Volverás?. No nos hemos despedido.


Título verdadero: Cosas que nunca te dije. Con P de ... potencial.